Ir al contenido principal

Exámenes de septiembre, ¡¡OMG!!

Bueno, bueno, bueno. Se acercan los exámenes de septiembre. ¡En serio! Si has llegado a esto en la asignatura de flauta es que durante el curso te has dedicado a sacar la flauta con mucho cuidado, tocar 3 minutos el Despacito y luego guardarla limpiándola con mucho esmero durante 35 minutos de reloj. NO MOLA.

Pero bueno, lo hecho hecho está, así que voy a darte un par de consejillos de profe de flauta para que la cuesta de agosto no sea muy dura.

¡Ponte a estudiar!

Esto es básico. Ponte un rato cada día. Si tienes que examinarte de flauta en septiembre significa que estás en profesionales, así que una horilla (tirando por lo bajo) al día no te la quita nadie. Sobre todo si te has dedicado a la vida contemplativa en julio.


Así que ponte un horario, saca la flauta y empieza a tocar. No me cansaré de decírtelo: el que más toca, mejor toca.

Organízate

En serio, si tras leer lo anterior te coges la flauta y te pones a tocar pasodobles una hora todos los días es pa matarte. Cómo decía el hippie aquél de los Simpsons: "simplifica tíiiio, simplifiiiiiiica"

Esto viene significando lo siguiente:

Si has palmado en junio, tu examen probablemente consistirá en: ejercicios, estudios (más o menos en función de lo enrollado/a que sea tu profe) y alguna que otra obra (depende de si además del Despacito has tocado algo más durante el curso). Pues bien, organízate el tiempo y dedícale a cada cosa el tiempo que necesita.

Calienta

Soy super pesao con esto pero es lo que hay. La flauta no suena igual la primera vez que te la llevas a la boca que después de un rato de calentamiento. Si quieres saber cómo calentar te cuento: unas cuantas respiraciones profundas, inspirando por la nariz y espirando por la boca; unos minutos de improvisación sin usar la lengua, todo legato. Si vas introduciendo poco a poco crescendos, diminuendos, vibratos e intervalos mejor que mejor; unas pocas escalas (cromáticas, diatónicas, hexátonas (si no sabes lo que son búscalo), rotas en intervalos, etc.) y arpegios legatto. Todo rápido pero controlado. Y por último, las mismas escalas y arpegios que has hecho pero articulando como te apetezca. Te recomiendo usar simple, doble y triple (si sabes cómo va) y el típico mix de algunas picadas y otras ligadas. En el Taffanes (que fijo que lo tienes) vienen un montón de convinaciones al comienzo de cada ejercicio.

Ejercicios 

Esto es como ir al gimnasio. Lo justo para estar en forma pero sin pasarse. Haz las maldades que te haya encomendado tu profe un par de varias veces y palante. Recuerda, toca siempre los ejercicios como si estuvieses en un concierto con orquesta y las escalas o arpegios fuesen solos. Tu cuerpo necesita aprender un camino, y cuantas más veces repita el bueno, antes se le quedará grabado. Hacerlo mal muchas veces por querer correr mucho solo ralentiza el proceso. Como nos decía nuestra seño: "despacito y con buena letra". Siempre que te vaya saliendo bien, ve aumentando la velocidad poco a poco.

Para una hora de estudio no más de 10 minutos de ejercicios.

Estudios

Esto no tiene mucha ciencia. Son un híbrido entre estudios y piezas. Se trata básicamente de seguir el mismo consejo de antes. Más vale tocarlos bien muchas veces despacio e ir aumentando la velocidad poco a poco que pegarte una torta detrás de otra intentándo tocarlos de arriba a abajo a toda velocidad. Te recomiendo que sigas el mismo esquema que para trabajar las obras: lo primero las notas y el ritmo. Cuando tengas eso dale caña a la articulación hasta que la tengas más clara que el agua. Luego dedícate a limpiar los pasajes de dedos que no te salgan bien hasta que los domines a la velocidad que quieres. Pasa después al sonido: matices, flexibilidad, vibrato, etc. y por último, pon las respiraciones que necesites. Si, por último. Porque no es lo mismo tocar una frase forte que piano. Así que no empieces la casa por el tejado.

Para una hora de estudio, no más de 20 minutos de estudios.

Obras

Y llegamos a la chicha buena. Las obras. Como te acabo lo de contar, el esquema es el mismo que para los estudios: notas y ritmo, articulación, digitación, sonido y respiración. No pases al apartado siguiente hasta que tengas claro el anterior. Eso de la multitarea es un mito (si, chicas, también va para vosotras). A la hora de interpretar vuestro cerebro necesita estar concentrado en una sola cosa: escuchar. Si, si, escuchar. En un concierto no puedes estar pensando en que para el mi sobre agudo en este pasaje tengo que quitar el dedo meñique, ni intentando recordar dónde tienes que respirar para llegar bien al crescendo al final de la frase. Cuando tocas solo tienes que estar pensando en disfrutar de la música que estás haciendo. Imagina al hombre bala justo antes de ser disparado en el cañon. ¿El brazo tenía que ponerlo así o así? ¿la cabeza hacia adelante o hacia atrás? ¿la espalda recta o curvada? Llegas a la red y no te has enterado del viaje. Lo más probable es que te lo hayas pasado haciendo aspavientos en el aire y gritando aaaaaaaaaaahhhhhhh!!!! Lo que viene pasando en un concierto o examen cuando no vamos preparados vamos. El tiempo de prepararse ya ha pasado. Ahora solo queda relajarse y disfrutar del concierto desde dentro. Y eso, colega, es una pasada.

Y por último...

En serio, lo más importante que debes recordar es que cuanto más tocas mejor tocas, y que cuanto más preparado vas a un examen, un concierto o una audición, más vas a disfrutar. Y si tú disfrutas, ellos disfrutan. Sean público, examinadores o la familia en Nochebuena diciéndote: anda niiiiiño/a, pos toca aaaalgo. La cuestión no es que los demás disfruten (que también, ya que son los que pagan las entradas, o te dan una plaza), es que tú lo pases lo mejor posible tocando y haciendo música, que es una de las cosas más maravillosas que harás en tu vida.

Un abrazo,
Carlos

Comentarios

Entradas populares de este blog

DESCUBRIENDO LA TÉCNICA INSTRUMENTAL: LA RESPIRACIÓN

Seguimos con nuestro viaje a través de la técnica instrumental. Si en el último post hablamos sobre qué es la técnica instrumental y cuales son las mejores formas de organizar su entrenamiento, ahora le toca el turno a la RESPIRACIÓN. Como ya os comenté anteriormente, la técnica instrumental se divide en cuatro grandes bloques: RESPIRACIÓN SONIDO DIGITACIÓN ARTICULACIÓN Cada uno de estos bloques tiene asociada una musculatura que hay que entrenar y desarrollar gradualmente si queremos que nuestra técnica instrumental mejore de forma rápida y equilibrada.  De nada nos servirá poder hacer escalas a velocidades de vértigo si nuestro sonido no es bueno (en el próximo post hablaremos de cuales son las cualidades de un buen sonido), igual que tampoco sirve haber desarrollado un gran sonido que no somos capaces de mantener cuando entra en juego la articulación. Por esto es de vital importancia que vayamos entrenando cada uno de los aspectos técnicos de manera pro

LOS 3 TIPOS DE TÉCNICA EN LA FLAUTA TRAVESERA

Si estas haciéndote esta pregunta: "¿tres?!!!", es que tienes que seguir leyendo esto. Pues si amigos y amigas, tres. Para tocar la de un manera medio decente, hace falta dominar mejor o peor tres tipos diferentes de técnica. ¿Cuáles son? 1. TÉCNICA CORPORAL Para tocar un instrumento, no viene nada mal conocer un poco nuestro cuerpo. Es decir, cómo funciona y cual es la mejor manera de emplear sus recursos sin llegar a romper algo por el camino. Y es que, aunque no os lo creáis, ¡se puede tocar sin dolor! Raro, eh?. Eso pensé yo hasta que mi hermana me dio un día cuatro consejillos que me cambiaron la vida. Si os duele algo, o si queréis saber como podéis evitar que os duela en el futuro a vosotros o a vuestros alumnos, no dudéis en preguntarle. Podéis contactar con ella por aquí , indicando que vuestra consulta va dirigida a María José o en nuestro correo electrónico educaflauta@gmail.com. No os perdáis sus vídeos sobre la posición de la espalda y las manos. Para m

DESCUBRIENDO LA TÉCNICA INSTRUMENTAL: LA DIGITACIÓN

Hola a todos Flutetrainer@s Volvemos a la carga con una nueva entrada de la serie "Descubriendo la técnica instrumental". Esta vez me voy a centrar en la digitación, o lo que viene siendo lo mismo, cómo mover rápido los dedos sin liarla parda.